Nuestra misión es hacer que la electricidad y la computación sean invertibles para todos convirtiendo la producción real verificada en activos transparentes en cadena.
En una era impulsada por la IA, la demanda de electricidad y computación crece exponencialmente. El Protocolo AGV aborda esta situación combinando huertos frutales, parques solares y minirredes de computación en el borde con telemetría del IoT y verificación en cadena para crear tokens sostenibles y respaldados por rendimiento. Nuestros activos iniciales se encuentran en Shaanxi, China, y tenemos planes de expansión en Asia y otros países.
Planta fotovoltaica de CdTe de 6 MWp (primer lote) con una producción anual proyectada de 7,3 GWh. Se están desarrollando unidades solares adicionales.
~100 000 kg de manzanas por 100 mu por año, integradas en los flujos de ingresos de NFT y monitoreadas a través de sensores IoT.
Clúster inicial de 1,5 MW (~1 PFLOPS) que proporciona ~1,31 GWh/año de carga computacional para cargas de trabajo de IA; se ha programado la implementación de nodos adicionales.
Cada vatio de electricidad y ciclo de cómputo se verifica y se ancla en la cadena antes de la acuñación de los tokens (Power-to-Mint). Esto garantiza la rendición de cuentas y la transparencia.
AGV adquiere o se asocia con huertos, parques solares y clústeres de cómputo, instalando sensores de IoT y telemetría segura.
Los datos de producción de energía y computación se recopilan en tiempo real, son validados por auditores y anclados en la cadena.
Los tokens se acuñan solo tras la verificación de la producción. El GVT se acuña a partir del rendimiento verificado; el rGGP se distribuye como incentivo basado en el mérito y puede convertirse en GVT. Los inversores ven exactamente cuánto de la producción real respalda cada token.
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